La playa es el escenario ideal para capturar la magia entre dos personas. Con la inmensidad del mar como testigo, cada sesión de pareja refleja la calma, el deseo y la pasión de una relación auténtica. Ya sea un paseo al atardecer, una carrera en la orilla o un abrazo bajo las estrellas, mi objetivo es capturar esos momentos íntimos y románticos, donde el amor se funde con el horizonte infinito.